EL ANTES Y EL DESPUES DE LAS ACTRICES QUE ME QUITARON EL SUEÑO

EL ANTES Y EL DESPUES DE LAS ACTRICES QUE ME QUITARON EL SUEÑO

JAVIER DE LUCAS

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MIS ESTRELLAS

La primera actriz que me enamoró fue Terry Moore. Nos quitó el sueño (a mi hermano y a mí) cuando la contemplamos extasiados en "Duelo en el fondo del mar", una película de aventuras que vimos cuando teníamos doce o trece años en el cine Palacio de la Música, y en la que hacía de la adolescente novia de Robert Wagner. Cuando la volví a ver en "Vidas borrascosas", el hechizo se esfumó. Creo que la siguiente fue Arlene Dahl, que me enamoró en "La mansión de Sangaree", me siguió enamorando en "Rifles de Bengala" y "La legión del desierto" y me desenamoró en "Ligeramente escarlata", donde la cambié por Rhonda Fleming.

Luego vinieron muchas más (yo era, cinematográficamente hablando, muy enamoradizo), pero también bastante voluble: en una película, quizá en dos o tres a lo sumo, se producía el flechazo, y en la siguiente, el olvido. Así ocurrió, por ejemplo, con Kim Novak, uno de mis grandes amores de cine, en "Un extraño en mi vida" (me dejó sin aliento), siguió con "Me enamoré de una bruja" y "Vértigo", y terminó con "Moll Flanders".

Después, las demás. Virginia Mayo en "Juntos hasta la muerte", Brigitte Bardot en "Y Dios creó a la mujer", Carroll Baker en "Gigante" y "Los insaciables", Jennifer O´Neill en "Verano del 42", Ursula Andress en "Doctor No", Elke Sommer en "Bahía de Palma", Cybill Shepherd en "Taxi driver", Kim Basinger en "Nueve semanas y media", Sharon Stone en "Instinto básico", Jennifer Connelly en "Labios ardientes", Grace Kelly en "Atrapa un ladrón", Caroline Munro en "La espía que me amó"...

y así otra y otra...y otra después de otra.

sábado, noviembre 30

MIREILLE DARC "ROBE NOIR"


De Vikki Dougan –la mujer que inspiró el personaje ficticio de Jessica Rabbit– en 1957 a Irina Shayk en los Oscar de 2019, pasando por la actriz francesa Mireille Darc en los años 70. El vestido negro con escote en la espalda, tan vertiginoso que llega a ras de los glúteos, nunca deja de asombrarnos
Mireille Darc en 1972
El más icónico de todos es, sin duda, el vestido que lució la actriz Mireille Darc en la película francesa Le Grand Blond avec une chaussure noire (1972). Un vestido de terciopelo negro de cuello alto que, a priori, parecía recatado hasta que su personaje se da la vuelta en el filme y muestra, no solo su espalda, sino también parte de la nalga. Un escote que la actriz vuelve a lucir, esta vez en un diseño de color blanco, en la secuela Le Retour du Grand Blond de 1974.
Cate Blanchett en el año 2000
El idilio de Cate Blanchett con los escotes en la espalda sobre la alfombra roja viene de largo y este es, posiblemente, el más icónico y extremo de todos ellos. La actriz posaba –por segunda vez en toda su vida– en la red carpet de los Oscar del año 2000 con un vestido negro de Jean Paul Gaultier con escote en la espalda aderezado con una cadena dorada que también llegaba a los brazos. Y solo era el principio…
Gillian Anderson en 2001
Todavía más revelador si cabe fue el escote en la espalda que lució Gillian Anderson en la fiesta post-Oscar de Vanity Fair de 2001 en el restaurante Morton’s en West Hollywood. La imagen ha pasado a la historia no tanto por el escote en sí mismo, sino porque la actriz optó por mostrar su ropa interior de la manera menos discreta posible. Cuando la intérprete de Sex Education vio a Hailey Bieber en la Met Gala de 2019, con un diseño de Alexander Wang de color rosa chicle con la misma abertura, ella misma hizo una comparativa de ambos looks en su cuenta de Twitter. “Otro ejemplo de cuando la necesidad es la madre de la invención” rezaba el texto refiriéndose seguramente al efecto “tanga”, incorporado al diseño en este caso, del vestido de Baldwin.
Katie Holmes en 2004
Tres años más tarde, la misma alfombra roja de la fiesta post-Oscar de Vanity Fair era testigo de otro backless dress que, aunque no tan comentado, si merece estar en esta galería por el estatus de icono de moda actual de su protagonista Katie Holmes. Corría el año 2004 cuando la joven actriz, que ya apuntaba maneras en la predicción de tendencias, lucía un sofisticado diseño negro de estas características.
Rihanna en 2012
Acostumbrados a los looks de impacto de Rihanna, es muy posible que este vestido negro con escote en la espalda se nos quede corto si lo comparamos con muchos de los inclasificables diseños que la cantante ha lucido sobre la alfombra roja. La de Barbados posaba en el photocall de los Grammy de 2012 con este vestido creado por Emporio Armani siguiendo sus indicaciones. “Esta es una colaboración entre Mr Armani y yo. Yo le ayudé a diseñarlo. Quería algo como Michelle Pfeiffer en Scarface, simple pero sexy y un poco gangster al mismo tiempo”, declaró en su día a E! Online.
Irina Shayk en 2019
El último vestido negro con un gran escote en la espalda que hemos visto sobre la alfombra roja es el de Irina Shayk en la gala de los Oscar de 2019. La modelo rusa posaba en la red carpet más esperada del año, junto a su entonces pareja Bradley Cooper y la madre de éste, acaparando todas las miradas. Su vestido era de la colección primera-verano 2019 de Riccardo Tisci para Burberry, la primera del diseñador italiano para la marca británica.
Adenorah en 2020
El pasado 14 de enero, la prescriptora francesa Anne Laure Mais, conocida como Adenorah en las redes, se hacía un selfie con un vestido de profundo escote en la espalda que nos recordaba a los míticos de Vikki Dougan y Mireille Darc. A pesar de que no quiso revelar la firma concreta del diseño, dio una pista al respecto etiquetando a la web de vestidos de alquiler Une Robe, Un Soir. El suyo es el modelo Mireille de la diseñadora Carolina Ritzler